Los que utilizamos nuestro propio vehículo para desplazarnos o durante los viajes, nos encontramos ante el dilema de dejarlo en un parking o en la calle.
En ocasiones no nos queda más remedio que utilizar un parking, ya que en la vía pública no encontramos sitio y otras, lo hacemos por rapidez, seguridad y cercanía al destino al que nos dirigimos.
Uno de los temas que más nos preocupa a la hora de aparcar, es la protección de nuestro coche y de lo que tiene en su interior.
Aunque se trata de algo poco probable, incluso en un parking podemos sufrir un robo, para evitarlo existen una serie de medidas que se deben tener en cuenta:
- Cuando entramos a un parking, lo primero en lo que debemos fijarnos es que nadie pase detrás de nosotros sin pasar el control. De esto modo, estaremos evitando la entrada de posibles intrusos cuyos fines sean cometer un hurto.
- Debemos tener un circuito de cámaras de seguridad, vigilancia 24/7 en nuestro parking sanclemente. En todas las zonas posibles, cuando se trata de un parking de gran tamaño es complicado abarcar todas las zonas, por lo que hay que situarlas en puntos estratégicos para controlar todas las zonas posibles.
- Tener personal de vigilancia que realice guardias de forma espaciada y controle las cámaras que graban en directo para poder observar cualquier anomalía y denunciarlo en el momento.
- Tener vigiladas las entradas de acceso físico para controlar las personas que entran y salen.
- Es muy importante tener lectores de matrículas, de esta forma fichamos todos los vehículos que hacen uso de las instalaciones y en qué momento las abandonan
- Una buena iluminación, ya que en estos espacios la luz es artificial y no es tan clara en unos sitios como en otros.
- Cuando dejamos estacionado el vehículo, debemos comprobar que todas las ventanillas se encuentren subidas, las puertas cerradas y, si es posible, no dejar objetos, bolsas, ropa a la vista. Ningún objeto que pueda llamar la atención y sea susceptible de hurto.
- Software especializado y un equipo informático actualizado.
El motivo principal por el que dejamos el coche en un parking es el temor a sufrir un robo, debido a que en la calle hay muchas más posibilidades de que ocurra. Sobre todo, sin dejar rastro y sin tener la opción de observar que ha pasado a través de una cámara para denunciarlo.
De modo que, dejándolo en un parking disponemos de estos dispositivos de vigilancia que, en caso de que se produzca un robo, podremos llevar a cabo una reclamación legal.
Otro de los motivos para dejar el coche resguardado, es el clima. Es un fenómeno incontrolable que puede causar daños o ensuciar nuestro vehículo, mientras que en un parking permanecerá cubierto de cualquier contratiempo.
La combinación de todos ellos, hacen que el Parking Sanclemente sea un lugar tranquilo, céntrico y seguro para los coches de nuestros clientes.
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